lunes, noviembre 09, 2009

Pero, ¿es una grulla o un pato?



Virus de gripe A traicioneros, hostiles oficinas de inmigración, transbordos en aeropuertos extraños, un pasaporte a punto de caducar y casi diez mil kilómetros he tenido que dejar atrás hasta poder llegar a Hiroshima. Allí finalmente he tenido el honor de servir durante quince minutos al sensei Masanori Katoh, quien me ha enseñado a hacer la eternamente imitada, pero nunca igualada orizuru (grulla) de Prison Break. Menos mal que las series de TV dan un sentido a mis viajes...

2 comentarios:

El Salsero dijo...

Veo que ya te has buscado algo que hacer en el despacho cuando el ruido de los compañeros en el pasillo no te deje dormir. :-P

Anónimo dijo...

Muy chula me tienes que enseñar.

Ciao

Heredia