lunes, abril 24, 2006

Remordimientos

Raskolnikov no pudo soportar la presión y tuvo que confesar su crimen.
Lady Macbeth llegó al borde de la locura y caminaba noctámbula lavándose las manos de sangre imaginaria.
Yo lo publico en mi bitácora: sí, he sido yo el que le dio el golpe al coche del vecino saliendo de mi plaza de aparcamiento. Le he pedido perdón. Mi seguro lo ha pagado. Aquí está la foto.
¡Ayuda, por favor! ¡Sólo quiero andar por las mañanas por enfrente del automóvil siniestrado y no tener que seguir avergonzándome!

2 comentarios:

Magneto dijo...

Bueno ... tú por lo menos dejas notitas y haces fotos. Hace tres semanas le metieron un viaje a mi coche mientras estaba aparcado y lo único que me dejaron fueron los restos del piloto delantero encima de los limpia. Deja de avergonzarte, al fin y al cabo eres un tío legal. Tu vecino está en deuda contigo.

Anónimo dijo...

Tu vecino está en deuda contigo.

Estoy de acuerdo con Alex. De hecho, creo que lo que deberías hacer es darle otro golpe al vecino, para que se entere de quién es el que manda. En estas ocasiones hay que dejar claro quién es el que tiene los huevos más grandes.

Y darle un buen ejemplo a Johann de cómo se trata a los vecinos. Con mano dura. :-P